Sin saberlo o sin darme cuenta toda mi vida he podido disfrutar de mi pasion por viajar, y digo que quizás sin darme cuenta, porque cuando inicié “viajandoconchary”, que comencé a ver todas las fotos de los viajes que había realizado, realmente me sorprendí. Amo viajar y conocer diferentes culturas, paisajes, comidas,etc.
Mi reciente viaje a Dubái y Jordania fue algo verdaderamente fuera de todas mis expectativas; desde que aterrizamos en Dubái luego de todas esas horas de vuelo, ver ese aeropuerto tan impresionante, que sólo puedo describirlo como sacado de una película futurista tipo Man in Black, el techo con aquella altura abrumadora, los colores de las paredes, las luces, etc., el ambiente te hace sentir que llegaste a un destino exquisito.
He visitado varios países y nunca de me había tocado que te entreguen un sim del destino y con 1 Mega de internet incluído.
Dubái es conocido por tener todo o casi todo lo más grande del mundo como el Burj Khalifa; esta torre posee 828 metros de altura, siendo así la estructura más alta del mundo actualmente, definitivamente es mi edificio favorito, me encantó lo majestuoso y moderno que se erige frente a los demás edificios, y definitivamente hay que subir para disfrutar la vista de la ciudad.
Dubái posee una gran cantidad de islas artificiales y centros comerciales, Dubái es una ciudad en la que la arquitectura y lujo, tienen el protagonismo.
Dubái la puedo describir en pocas palabras como un lugar donde los edificios compiten entre ellos sobre cual tiene el diseño más impresionante o mayor altura.
Algo muy importante a tomar en cuenta es las largas distancias entre los lugares, por lo que organizar el esquema de viaje te permitirá optimizar el tiempo para poder aprovechar al máximo tu estadía. Como fui en tour esta parte la tuve cubierta.
En nuestro primer día estuvimos visitando el antiguo barrio de “Bastakya” nos ofrece una vista de casas tradicionales y se pueden apreciar las torres de viento que eran en el pasado el sistema natural de aire acondicionado. Dentro de este barrio ellos tienen preparada una de las casas con el estilo de vida y decoración tradicional, lo que nos da una idea de cómo vivían y conocer un poco de sus costumbres.
Más tarde cruzamos el arroyo de Dubái en un tradicional taxi acuático llamado Abra, que es un barco que sirve para trasporte dentro del arroyo, el paseo fue corto pero divertido. Al cruzar al otro lado llegamos a los zocos de Oro y especias (mercado), es realmente increíble la cantidad de oro que se comercializa en esa zona, es un lugar fácil de caminar y se siente completamente seguro estar allí como turista, aunque es la parte antigua y los vendedores te llaman para ofrecerte sus productos, siente igual seguridad que caminar en la parte moderna. En esta zona se puede comprar todo tipo de especias y trajes típicos, entre artesanías, souvenir, y muchas cosas más.
En la noche en el entorno de nuestro hotel, caminando pudimos encontrar una gran variedad de opciones para cenar en las diferentes noches.
Miracle Garden- Dubái frame ambos lugares son un most a visitar durante tu estadía en Dubái, en el Jardín puedes ver una gran cantidad de variedad de flores con un paisajismo exquisito, es muy refrescante el caminar por todo aquel jardín e ir descubriendo los diferentes escenarios que tienen preparado. El Dubái Frame conocido como “El marco de fotos más grande del planeta” es una estructura de dos torres de 150 metros de altura conectadas por un puente acristalado de casi 100 metros donde puedes caminar de una torre a otra viendo a través de un cristal el suelo, caminar por dicho pasillo da algo de susto, pero emociona a la vez.
La siguiente parada fue ABU DHABI, para visitar la mezquita Jeque Zayed conocida como la tercera más grande del mundo, esta mezquita es hermosa, todos los detalles que tiene, los materiales con los que fue construida, ese tono blanco que impresiona, quedé enamorada de ella; cuando entras y ves todo aquello, te hace sentir que estás en un lugar realmente increíble. Algo que llamó fuertemente mi atención es que la entrada hacia la mezquita debes pasar por un centro comercial, esto definitivamente, no me lo esperaba.
El safari por el desierto… uff me encantó todo el trayecto dando brincos de un lado al otro y sentir el deslizamiento del vehículo por la arena, fue algo que de verdad volvería a repetir, y yo no soy tan fan de la adrenalina, pero esto me encantó. El atardecer en el desierto es una belleza, tan tranquilo con tantos colores que de verdad te deja sin palabras.
En el día que teníamos libre nos fuimos a Zero Gravity. Beach and pool club. No sé si será porque soy una amante de la playa, pero este lugar me ENCANTÓ, la mezcla de una vista urbana y playa fue una gran sorpresa. El ambiente tranquilo, buena música y bello paisaje. Nos tocó el atardecer allá y fue MARAVILLOSO.